No importa lo que hayas conseguido, el éxito o la belleza que tengas, o lo mucho que te hayas esforzado por aumentar tu autoestima y tu confianza en ti mismo: si tienes un crítico interior negativo y desagradable que te critica constantemente o que descarta tus logros en todo momento, tu autoestima siempre será baja.
Tu crítico interior tiene muchas funciones. Es esa voz interior negativa que:
1- Te culpa de las cosas que van mal, sin importar si es culpa tuya o no.
2- Te compara con los demás, especialmente con sus logros y capacidades, y te considera insuficiente.
3- Establece estándares imposibles de perfección.
4- Exige que seas el mejor en todo y, si no lo eres, te trata como si no fueras nada.
5- Lleva la cuenta de tus fracasos y defectos, pero nunca te recuerda tus muchos logros y puntos fuertes.
6- Exagera tus debilidades utilizando palabras como «siempre» y «nunca». Siempre metes la pata en el trabajo. Nunca terminas lo que empiezas.
La mayoría de nosotros experimentamos el crítico interior como la «voz» en nuestra cabeza, y la mayoría de las veces no somos conscientes de que está ahí. Por lo general, sólo «oímos» a nuestro crítico interior alto y claro cuando estamos a punto de intentar algo nuevo, cuando cometemos un error o cuando estamos en una situación de estrés.
Cuando cometes un error, es posible que oigas a tu crítico interior decir algo como «¡Pero serás tonto!» o «Ya estás otra vez, metiendo la pata como siempre. ¿No puedes hacer nada bien?».
Antes de hacer una presentación en el trabajo, puedes oír «Deberías haberte preparado más. Vas a hacer el ridículo delante de toda esta gente».
¿Lo has experimentado alguna vez?
El primer paso es empezar a ser consciente de tu crítico interior y de lo que te dice. Lo difícil es que, incluso cuando te das cuenta de tu crítico interior, parece una parte natural y familiar de ti y sus despiadados ataques parecen razonables y justificados.
Con cada juicio negativo, tu crítico interior te debilita y destruye cualquier sentimiento positivo que tengas sobre ti mismo. Tu crítico interior a menudo aparece como tu propia voz y puedes sentir que simplemente son tus pensamientos que juegan contigo.
Pero no te equivoques. No has nacido con un crítico interior. Fue programado en ti, inconscientemente, en tu primera infancia y lo has trasladado a tu vida adulta.
Hay varias técnicas para acallar a nuestro crítico interno aprendiendo a amarnos y respetarnos.
Una de las formas más poderosas de silenciar a tu crítico interior es contestarle literalmente.
Puede que te sientas incómodo cuando le respondas a tu crítico interior, pero al igual que no debes dejar que otra persona te maltrate, no puedes permitir que tu crítico interior desgaste tu autoestima.
La técnica del espejo
He aquí un ejercicio sencillo y divertido para ayudar a superar el perfeccionismo. Coge un post-it y escribe la frase «Soy suficiente» en el espejo de tu baño, en tu habitación, en tu agenda, en tu pantalla de móvil. Con el tiempo, mirar esta frase repetidamente condicionará tu mente a creer que eres suficiente… suficiente para ser amado y aceptado tal y como eres.
Cuando surja tu voz interior crítica, después de silenciarla, piensa en lo que le dirías a tu mejor amigo si tuviera esos pensamientos críticos sobre ella misma. Ahora dilo en voz alta y deja que lo asimile. Date las gracias, sabiendo que estás haciendo lo mejor que puedes en este momento.
Sigue haciéndolo hasta que esta voz cálida y nutritiva sea más fuerte que tu crítica interior.
No permitas que los demás te exijan perfección a ti tampoco
Si estás con alguien que se queja constantemente de que no haces las cosas o de que nunca haces lo suficiente, date cuenta de que es esa persona la que tiene el problema. Esta persona nunca va a estar contenta hagas lo que hagas.
Entrar en contacto con tu lado oscuro
No te preocupes, esto no significa hacer nada malo, moralmente incorrecto o malvado. Simplemente significa que sabes que, como todo ser humano, tienes cualidades más positivas que otras, luz y oscuridad, como seres duales que somos. Lo importante es aceptarlo y trabajar para mejorar estas cualidades.
1. Enumera todas las cualidades que te desagradan en los demás.
2. Enumera las 5 cualidades que te desagradan de ti.
Permítete ser imperfecto
Presta mucha atención a la frecuencia con la que te controlas y te censuras a ti mismo y a la intensidad con la que te centras en ser «bueno» y «perfecto». Aprende a ser flexible contigo mismo.
– Si eres un adicto al trabajo, escápate del trabajo antes de tiempo o tómate un día libre y ve a hacer algo divertido.
– Si eres un fanático de la salud, permítete un capricho a la semana. Tal vez compre el chocolate que tanto ansía o coma algo que le apetece y que no está en su plan de dieta.
– Si controlas constantemente lo que gastas, afloja un poco de vez en cuando y date un capricho de vez en cuando.
Y lo más importante, si siempre estás alegre y dulce por fuera, incluso cuando no te sientes así por dentro, empieza a hacer saber a la gente cómo te sientes realmente.
No tienes que ser perfecto para ser digno de amor. No tienes que ser perfecto para ser una persona increíble, fuerte y exitosa.
Así que deja de intentar ser perfecto y empieza a abrazarte y aceptarte a ti mismo, tanto tus defectos como tus atributos positivos. Cuando cometas un error, perdónate, aprende de él y sigue adelante, en lugar de obsesionarte con él.
Igualmente importante es que no permitas que nadie más se obsesione constantemente con tus errores ni te exija la perfección.
Con cariño,
Rosa Herrera